Como siempre os contamos, las tendencias en el mundo del interiorismo y la arquitectura nacen como respuesta al contexto social de cada época y los cambios que, como sociedad, experimentamos.
En este sentido, la salud mental ha sido la protagonista de este 2021. Y es que después de dos años de pandemia, sufrimos un agotamiento psicológico que, sumado a las preocupaciones y responsabilidades del día a día, hace que el estrés y la ansiedad nos visiten más de lo que nos gustaría. No es de extrañar entonces que una de las corrientes que venga con más fuerza este 2022 sea el Slow Deco. ¿Y que es eso del Slow Deco? Te preguntarás. Tranquil@, aquí está WINK para contarte todo sobre esta nueva tendencia.
Desconexión, calma y armonía son los tres pilares de este estilo de decoración que surge con el objetivo de convertir nuestro hogar en un santuario de relajación, que nos permita sentirnos en paz física y mentalmente. Una fortaleza contra el estrés del día a día. Nuestro place to be. No suena mal ¿verdad? Si quieres saber cómo aplicar el Slow Deco a tu hogar, sigue leyendo. Compartimos contigo todas las claves ; )
Estancias abiertas y funcionales
Espacios que nos inviten a disfrutar con una decoración sencilla y precisa, que nos haga sentir en calma y armonía con la estancia. Los ambientes abiertos favorecen la reunión de los convivientes, y es que si algo hemos aprendido estos dos últimos años es la importancia de pasar tiempo con la gente que queremos. Y que mejor forma de disfrutar de ellos que en un espacio slow, tranquilo y confortable.
Bienestar slow
Otro de los pilares de esta tendencia decorativa es conseguir el llamado bienestar slow. Esa sensación de paz y tranquilidad que tanto ansiamos al llegar a casa. Para ello necesitamos disponer de un dormitorio luminoso y silencioso donde lo central sea el descanso; al igual que tener un hall que nos ayude a disminuir el estrés y la presión con la que llegamos a casa. Darle valor a muebles como un zapatero, un banco donde dejar tus pertenencias, o un perchero para poner tu ropa, nos aportan una bienvenida acogedora y liberadora.
La importancia de los colores
El beige y el blanco son nuestros mejores aliados para lograr un espacio Slow Deco. Colores que aportan amplitud, calma y calidez. También puedes apostar por los tonos azules, que transmiten serenidad y tranquilidad.
Rincones especiales y detalles que marcan la diferencia
Decorar nuestro hogar con rincones especiales para leer tu libro favorito, tomarte un café caliente o simplemente para escuchar música y relajarte, ayudan a crear esa atmósfera slow de la que hablamos. Para potenciar ese efecto de oasis de paz, te recomendamos incorporar materiales y tejidos naturales, y perfumar las estancias con fragancias y velas aromáticas.
¿Qué opinas de este estilo? ¿Te atreves con la decoración slow? ¡A nosotros nos encanta!