Originado en los países en los que este mar está presente, el estilo mediterráneo se ha convertido en una apuesta segura y atemporal para aquellos que buscan darle a su hogar un estilo relajado, cálido y natural. Sus destacables distintivos, entre otros, son las formas redondeadas (en la propia arquitectura de la vivienda y/o en su decoración), los colores en tonos arena y mar, las vigas a la vista y los suelos en diferentes estilos de piedra. En este artículo, indagaremos en diferentes aspectos del estilo mediterráneo y veremos cómo podemos aplicar a nuestro hogar el gusto propio de las villas italianas y las islas griegas.
Colores y materiales característicos
Los colores y materiales que utilicemos para personalizar el espacio son cruciales si queremos acercarnos al estilo mediterráneo. Debemos utilizar una paleta de colores en la que destaquen los tonos blancos, terracota e incluso azules y verdes suaves para añadir toques de color. Esta gama pretende aludir a el cielo, la tierra y el mar, y representar valores como la frescura, la serenidad, la naturalidad y la firmeza.
En lo que a materiales se refiere, son varios los que podemos distinguir en las espacios de inspiración mediterránea. Siguiendo la línea de los colores que predominan en este estilo, son muy comunes los materiales como la cerámica o la piedra, ya sea en forma de paredes decorativas, suelos o vajillas. Los mosaicos también son muy utilizamos para aportar textura y colores a las estancias, los cuales, además, pueden hacer que cada hogar tenga piezas únicas y personalizadas. A parte de éstos, es frecuente ver otros elementos que, si bien no son tan característicos del estilo mediterráneo, se utilizan para complementar los mencionados, como la madera desgastada o el mármol, aportando detalles más rústicos y sofisticados.
Mobiliario y decoración
Los muebles y objetos decorativos propios del estilo mediterráneo tienden a generar una conexión con la naturaleza y las tradiciones de las tierras mediterráneas. Es muy común que encontremos muebles de madera combinados con sillas y armarios de mimbre o ratán, creando una sensación muy acogedora y cálida. En cuanto a la decoración per se, destacan los jarrones y las macetas con plantas, aportando un aire más fresco al hogar, a través de lavanda, olivos o hibiscos, entre otros. Otra de las principales características del estilo mediterráneo nos las hornacinas en forma de estanterías, las cuales suelen ser decoradas con libros, damajuanas, jarrones o velas. La clave del éxito para conseguir una fiel decoración al estilo mediterránea está en combinar la sencillez con la autenticidad y la tradición mediterránea con detalles más personales.
Iluminación
Si algún tipo de iluminación destaca en la estética mediterránea con las lámparas de techo colgantes. Encontramos infinidad de pantallas de muchísimas formas, colores y materiales, pero todas guardando un estilo similar. Estas lámparas se caracterizan por ser fuentes de luz cálida que contribuyen al ambiente relajado y acogedor de este estilo. Sin embargo, esta funde de iluminación artificial siempre se debe acompañar por la mayor luz natural posible, con el objetivo de recrear esa sensación de estar bajo el sol mediterráneo. Para ello, se recomienda utilizar cortinas y persianas que dejen pasar bastante cantidad de luz sin perder privacidad en nuestros hogares, fomentando también la sensación de amplitud. También podemos situar otros tipos de iluminación en áreas más específicas para dirigir la atención a un espacio u objeto en particular, como una isla de cocina o un gran espejo, mediante apliques de techo o railes de luces led.
Estilo mediterráneo para jardines
El estilo mediterráneo se puede ganar mucha presencia en los exteriores de los hogares, y son muchas las formas en las que lo podemos introducir. Las plantas y la vegetación juegan un papel realmente importante y pueden introducirse de muchas maneras, desde árboles grandes como olivos o cítricos hasta pequeñas plantas como los cactus o diversos setos. Algo que también podemos destacar de la vegetación es la iluminación con la que se suelen decorar los exteriores, por ejemplo, a través de miras de luces en los propios árboles.
Pensando en el clima mediterráneo con el que nace este estilo, encontramos varios métodos para resguardarnos del sol, que además pasan a convertirse en otro de los elementos clave de este estilo. Los techos fabricados con materiales como la madera o el bambú pueden ser una opción perfecta para combinar funcionalidad y estilo. Si buscamos opciones más clásicas, podemos utilizar parasoles que combinen con la decoración y conseguir que se mimeticen con el ambiente.
El estilo mediterráneo se ha consolidado como una opción popular y atemporal en el ámbito de la decoración y la arquitectura. Sus características distintivas, como la luminosidad, los colores inspirados en el mar y el sol, los materiales naturales y las formas arquitectónicas tradicionales, crean un ambiente acogedor y lleno de encanto en cualquier espacio. Ya sea en interiores o exteriores, el estilo mediterráneo evoca una sensación de frescura, relajación y conexión con la naturaleza. Si te ha llamado la atención este estilo o quieres saber más sobre cómo podría adaptarse en tu hogar, no dudes en contactarnos para obtener más información y estar a sólo unos pasos del hogar de tus sueños.
