En los últimos años, los cerramientos acristalados interiores se han convertido en uno de los elementos favoritos de arquitectos e interioristas. Y no es de extrañar, teniendo en cuenta todos las posibilidades y ventajas que ofrecen.
Tal y como afirma nuestra Responsable de Interiorismo, Tayri Armas, los cerramientos acristalados interiores no son solo la mejor opción para potenciar la amplitud y luminosidad de la vivienda, sino una solución perfecta para favorecer la comunicación e integración de los espacios, sin dejar de delimitarlos y sin renunciar a la intimidad.
Imagen: proyecto WINK GROUP.
Se trata de una fórmula perfecta para conectar y separar estancias al mismo tiempo. Las conectamos visualmente, para ganar amplitud, pero cada una de ellas sigue teniendo su propio espacio delimitado. Son distintos ambientes, aunque visualmente formen parte del mismo espacio. Según Tayri, “son una opción muy adecuada, por ejemplo, para conectar cocinas y salones. Nos permite integrar ambas estancias y conseguir así que nuestra casa parezca más grandes y luminosa, pero sin tener que preocuparnos de los típicos miedos de las cocinas abiertas: ruidos, olores, etc.”
Imagen: proyecto WINK GROUP.
Otra de las principales ventajas de este recurso arquitectónico y decorativo reside en la gran variedad de formatos que ofrece: puertas correderas o abatibles, puertas fijas, tabiques acristalados, soluciones acristaladas con fijos laterales y puertas centrales correderas… Diferentes opciones que podréis admirar en muchos de nuestros proyectos, ya que nos encanta emplear este tipo de cerramientos en nuestras reformas integrales. Un ejemplo de ello es este cerramiento lacado negro que os enseñamos en la imagen superior. Un diseño que integra visualmente la cocina en el salón, delimitando o conectando ambos espacios, según las necesidades, gracias a unas puertas correderas de suela a techo.
Imagen: proyecto WINK GROUP.
Imagen: proyecto WINK GROUP.
En cuanto a los materiales y acabados “podemos encontrar multitud de opciones que combinan el vidrio con aluminio, hierro, madera o PVC. Aunque nosotros siempre solemos trabajar con aluminio. Y si hablamos de los colores más destacados para este tipo de solución, en los cerramientos interiores de nuestros proyectos predominan sobre todo los tonos negros, blancos y dorados”. Señala nuestra interiorista.
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